Un hombre de 38 años fue golpeado por un camión cuyo conductor se quedó dormido al volante en Lancaster, causando un fuerte choque. A pesar de las disputas, CAG demostró negligencia y obtuvo un acuerdo de $1.7 millones por sus lesiones.
El demandante, un hombre de 38 años en el momento del accidente en cuestión, conducía su vehículo en una carretera pública en Lancaster, California; tiempo durante el cual, el demandado, que en ese momento se quedó dormido al volante, provocó que su vehículo se desviara hacia el tráfico que se aproximaba, momento en el que el lado del conductor del vehículo del demandado chocó con todo el lado del conductor del vehículo del demandante, arrancando el eje trasero y los neumáticos del vehículo del demandante.
La intensidad del impacto ha causado al demandante miles de dólares en daños personales. Se manifiesta que el demandado no prestó atención a su agotamiento y se quedó dormido mientras conducía, lo que precipitó una colisión con el vehículo del demandante. El demandado conducía el vehículo de manera tan imprudente, en violación de los siguientes códigos de vehículos de California: 21650: «En todas las carreteras, se conducirá un vehículo por la mitad derecha de la carretera». 22350 — «Ninguna persona conducirá un vehículo por una carretera a una velocidad superior a la razonable o prudente teniendo en cuenta el clima, la visibilidad, el tráfico, la superficie y el ancho de la carretera, y en ningún caso una velocidad que ponga en peligro la seguridad de las personas o los bienes.» 23103 — «(a). Una persona que conduce un vehículo en una carretera haciendo caso omiso deliberado o desenfrenado de la seguridad de las personas o la propiedad es culpable de conducir imprudentemente».
Como resultado de su accidente automovilístico, el demandante sufrió lesiones en la cabeza, el cuello, la parte superior de la espalda, la parte media de la espalda, la parte inferior de la espalda y el hombro derecho, junto con dolores de cabeza (con conmoción cerebral asociada y lesión cerebral traumática). Las lesiones del demandante fueron lo suficientemente importantes como para incurrir en 758.000 dólares en gastos médicos. El demandante tuvo que someterse a cirugías de la columna cervical y lumbar, y se le recomendó que se sometiera a una terapia de neurorrehabilitación, ya que ahora tiene dolores esporádicos continuos en la columna cervical y lumbar y dolores de cabeza intermitentes, por lo que necesitará tratamiento quiropráctico y de fisioterapia intermitente en el futuro, junto con una terapia de neurorrehabilitación y evaluaciones neuropsicológicas.
Los demandados impugnaron las reclamaciones del demandante por lesiones y daños. Los demandados también cuestionaron la razonabilidad y la necesidad del tratamiento médico de los demandantes. Sin embargo, a través del testimonio de médicos expertos, se determinó que las lesiones y el tratamiento del demandante eran razonables y necesarios, teniendo en cuenta la gravedad del impacto. El Sr. Khakshooy pudo recuperar 1.700.000 dólares de la compañía de seguros del demandado para el demandante.
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